El mejor sitio en todo el poblado para admirar la belleza de su mar y la riqueza artística.
El malecón sin duda es la franja más antigua de esta población. Si pudiera hablar narraría historias de mayas, europeos y mestizos, de trabajo a fuerza de machete para abrir caminos desde la densa selva, de pequeñas y grandes embarcaciones, de una prominente actividad mercantil con lugares remotos de América, y hoy de largos paseos de los pobladores así como de visitantes de todo el mundo.
Posee unas cómodas bancas en el centro para disfrutar de un atardecer frente al mar, y se encuentra dividido por una calle del parque central, rodeado de restaurantes, bares y tiendas con piezas originales de artesanos.
Este bello lugar, de gran valor histórico y cultural, es un rincón perfecto para descansar, en esta ventana al mar también se pueden encontrar diversos prestadores de servicios turísticos que te llevan a conocer algunos cenotes y otras maravillas del arrecife ó rentar un tour en bicicleta.
Consulta nuestro artículo Pueblo con Encanto.