27 de septiembre: Día Mundial de Turismo Sostenible
“Un viaje responsable no solo es mejor para nuestro mundo, sino que también es más interesante y memorable. El turismo responsable es el futuro de los viajes”. Simon Reeve
Hablar de Playa del Carmen sin referirnos al destino turístico preferido por muchas personas a nivel mundial sería dar un comentario incompleto, sobre todo porque ha sido clasificado en el puesto número 20 entre los mejores destinos internacionales del mundo, según los TripAdvisors Travelers´ Choice Awards en 2017, debido a su belleza natural, actividades vibrantes y atractivos culturales, siendo visitado por más de 15 millones de turistas reportados anualmente.
Con esta cantidad de personas visitantes, es indudable que se genera una gran cantidad de residuos, los cuales se calculan en aproximadamente 600 toneladas diariamente en promedio, llegando a aumentar hasta las 900 toneladas en días pico, durante temporadas de alta afluencia turística, como Navidad y Año Nuevo. Este hecho se convierte, evidentemente, en un problema ambiental al no existir un servicio eficiente de recolección, clasificación y reciclaje. Y esto es solo por mencionar los residuos sólidos, ya no hablemos del reto de tratar los aproximadamente 31,104 metros cúbicos de aguas residuales que se generan diariamente en este destino turístico.
Ahora bien, dejemos Playa del Carmen y pensemos en los retos que enfrentan otros destinos turísticos como Cancún o Tulum, en la misma Riviera Maya; Puerto Vallarta, en el estado de Jalisco; o Los Cabos, en Baja California Sur. También cabe preguntarse qué demandas tendrán ciudades como Barcelona, en España, o París, en Francia, que recibe más de 89.4 millones de turistas cada año. Los retos y amenazas ambientales son enormes.
Los destinos turísticos enfrentan hoy desafíos significativos, como la sobreexplotación de los recursos naturales, la presión sobre la vivienda y el impacto sociocultural negativo, además de la crisis climática. Por ello, es fundamental poner atención al turismo a nivel global y destacar su valor, no solo social, cultural, político o económico, sino también los riesgos e impactos ambientales que genera, entre ellos: la emisión de gases de efecto invernadero, la contaminación y generación de residuos, el consumo excesivo de agua, el deterioro de ecosistemas y biodiversidad, la erosión del suelo, el daño a ecosistemas sensibles, la contaminación del suelo, la congestión poblacional y los impactos bioculturales.
De esta forma, la Organización Mundial del Turismo (OMT) instauró en 1980, el 27 de septiembre como el Día Mundial del Turismo Sostenible, conmemoración con la que se busca equilibrar el desarrollo económico del sector con la conservación del medio ambiente, la preservación cultural y el bienestar de las comunidades locales.
De esta forma, la Organización Mundial del Turismo (OMT) instauró en 1980 el 27 de septiembre como el Día Mundial del Turismo Sostenible, conmemoración que busca equilibrar el desarrollo económico del sector con la conservación del medio ambiente, la preservación cultural y el bienestar de las comunidades locales.
La transición hacia un modelo turístico responsable y competitivo es clave para que el turismo siga siendo una fuente de prosperidad sin comprometer el futuro del planeta ni de las comunidades, principio fundamental de la sostenibilidad. Este año, el lema de la conmemoración es “Turismo y transformación sostenible”, que destaca el potencial transformador del turismo como agente de cambio positivo. Más que un sector económico, el turismo actúa como un acelerador del progreso social, favorece la educación, genera empleo y crea nuevas oportunidades para todos.
Sin embargo, aprovechar plenamente este potencial y materializar estos beneficios requiere la adopción de un enfoque bien planificado e inclusivo. No basta con un crecimiento simple: es necesaria una buena gobernanza, planificación estratégica, seguimiento riguroso y establecimiento de prioridades claras que se alineen con los objetivos de sostenibilidad a largo plazo.
Gestionar el reto del turismo no es nada trivial, ya que esta actividad representa aproximadamente el 7.5% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial y genera empleo para el 10% del sector laboral global. En México, la industria turística ocupa un lugar crucial en la economía, representando alrededor del 15.1% del PIB. Con cifras de tal relevancia, resulta imprescindible preocuparse por la sostenibilidad del sector.
El turismo sostenible se basa en tres pilares fundamentales: impacto ambiental mínimo, respeto por la cultura local y beneficios económicos equitativos para las comunidades anfitrionas. Más allá de limitar daños, su objetivo es generar valor positivo para todos los actores involucrados. En el marco del Día Mundial del Turismo Sostenible, es indispensable que tanto viajeros como actores del sector turístico adoptemos una visión de largo plazo que combine desarrollo económico, cuidado ambiental y respeto cultural. Solo así el turismo podrá seguir siendo una actividad enriquecedora —y rentable— para el mundo y sus habitantes.
Por: Cristóbal C. Carrión H.*
Foto: Los Nidos, Xul-Ha Eco Habitat
*Maestro en ciencias y biólogo.
Divulgador de la ciencia, escritor y ex director del Planetario Sayab.
Consultor ambiental.
Un apasionado del conocimiento y de su exploración.
tribu.sustentable.mx@gmail.com