Los murciélagos ó “dzotz” en lengua maya, son mamíferos que se caracterizan principalmente por su capacidad de volar y por la especialización anatómica que les permite el vuelo.
Características de los murciélagos.
En la actualidad existe un registro de 1116 especies de murciélagos a nivel mundial. De éstas, 139 habitan en México; y alrededor de 60 en la Península de Yucatán.
Una especie, el murciélago amarillo yucateco (Rhogeessa aeneus) es endémica de la Península de Yucatán.
Debido a la gran variedad de especies que existen, el cuerpo del murciélago puede variar. Sin embargo, hay algunas características que todos comparten, como tener el cuerpo cubierto por una capa de pelo muy corto que les proporciona protección, tanto en ambientes húmedos como frente a bajas temperaturas. Casi todos los murciélagos son livianos (a excepción del murciélago gigante), ya que pesan 10 kilos como máximo.
Los dedos delanteros de estos animales se distinguen por estar unidos gracias a una membrana delgada. Esta membrana les permite emprender el vuelo y controlar la dirección que toman con una mayor facilidad. Cuando aterrizan, la repliegan sin problemas.
Los murciélagos son un grupo ecológicamente importante por la diversidad de procesos en los que intervienen, y, debido a que pueden responder a cambios en los ecosistemas producidos por el hombre han sido considerados como indicadores ecológicos de calidad de hábitat.
Alimentación.
Los murciélagos tienen una gran variedad de hábitos alimentarios, dependiendo de lo que consumen se dividen en seis categorías: insectívoros, polinívoros o nectarívoros, frugívoros, carnívoros, ictiófagos y hematófagos.
De esta manera, estos mamíferos participan activamente en el reciclaje de nutrientes y energía en el ecosistema. Debido a su abundante y alto consumo de alimento, los murciélagos actúan como reguladores naturales de poblaciones de invertebrados, principalmente de insectos como los de la plaga del maíz, y como importantes dispersores de polen y semillas de muchas especies de plantas
Por tanto, los murciélagos juegan un papel ecológico importante en los ecosistemas ya que son los principales dispersores de semillas y polinizadores de plantas, ayudando a la regeneración de las selvas.
Muchas especies se alimentan de insectos que capturan al vuelo o de algún sustrato, como ramas, hojas o del suelo. Otras se alimentan de frutos o del néctar y polen de las flores. También las hay carnívoras que se alimentan de peces, ranas, lagartijas, ratones y pájaros.
La mayoría de las especies tienen actividad nocturna o crepuscular, y durante el día, cuando descansan, necesitan un lugar seguro que les ofrezca protección del so,la lluvia y sus depredadores.
¿Cuál es el hábitat de los murciélagos?
Es frecuente verlos en lugares de clima tropical y templado, mayormente en bosques, aunque también son capaces de vivir en desiertos, sabanas, zonas montañosas y pantanos. Prefieren las cuevas y los árboles para descansar o hibernar, pero también es posible encontrarlos en los rincones oscuros de las casas, las grietas en las paredes y los troncos.
Algunas especies viven en cuevas, pero otras usan plantas, árboles huecos, cuevas, o edificios viejos y abandonados, entre otros. En algunos lugares es posible encontrar varias especies en el mismo refugio, donde cada especie tiene su área favorita, escogida de acuerdo a las condiciones de humedad, luz y temperatura.
Los murciélagos tienden a vivir en grupos o colonias, pero algunas especies pueden ser solitarias. Los grupos de individuos pueden no estar relacionados, pero en muchas ocasiones son grupos familiares o harenes defendidos por uno o varios machos.
Algunas colonias pueden tener funciones especializadas, por ejemplo, para la maternidad, el aprendizaje o la hibernación.
La mayoría de las hembras tiene una sola cría después de un período de gestación de tres meses. Se cree que los murciélagos adultos viven de 5 a 10 años.
Comunicación entre murciélagos.
Una habilidad particular que poseen es la llamada ecolocación; es un sistema que permite visualizar los objetos gracias a sonidos de muy baja frecuencia, ya que el murciélago emite chillidos que rebotan en estos objetos y, cuando el sonido regresa, son capaces de deducir qué los rodea. Este sistema que utilizan para orientarse, comunicarse y encontrar alimento a través de la emisión de ultrasonidos les proporcionan información como si estuvieran viendo el objeto aun en la total oscuridad. Los murciélagos que comen frutas y néctar poseen, además de la ecolocación, una excelente visión nocturna y un sentido del olfato muy fino que les permite localizar su alimento.
La gran abundancia de los murciélagos y su diversidad alimenticia los hace muy importantes desde el punto de vista ecológico y económico.Se estima que en las regiones tropicales los murciélagos frugívoros dispersan de 2 a 8 veces más semillas de plantas pioneras que las aves, lo cual los convierte en elementos fundamentales de la regeneración natural de selvas tropicales. Asimismo, los murciélagos forman parte de la cadena alimenticia, por lo que son indispensables para mantener otras poblaciones de vertebrados como reptiles, aves y otros mamíferos que se alimentan de ellos.
En Quintana Roo, se los puede encontrar muy fácil en cuevas de cenotes y cavernas. Los toolchés ó franjas arboladas en torno a los cenotes; son anillos de vegetación que cumplen varios propósitos, evitar que el agua de las lluvias arrastre tierra y piedras hacia el cenote y lo azolve, y servir como refugio a los animales silvestres que acuden a beber de los cenotes.Estos toolchés, a su vez son fundamentales para la protección y conservación de especies de murciélagos raras o amenazadas como el falso vampiro orejón Chrotopterus auritus y el murciélago orejudo Micronycteris schmidtorum.
Lamentablemente, los murciélagos suelen ser objeto de mitos y notas negativas que en ocasiones proporcionan información incorrecta, poniendo en riesgo su conservación. Cuidemos la flora y la fauna aprendiendo a través de la lectura, y de la sana convivencia.